La experiencia del Autocine

- Cerré un ciclo... fueron las palabras del emocionado director de la película Gente mala del Norte, cuando guardaba cables y comenzaban a retirarse los vehículos del recinto del Autocine.
Entre bocinazos, aplausos y gritos de felicitaciones, un Riquelme feliz, comentaba con los ojos vidriosos, por la radio del evento que agradecía todo el cariño de la gente que se manifestaba dando bocinazos a modo de aplauso final... No nos olvidaremos de esto, repetía.
Durante varias horas antes del evento, los automovilistas hicieron una larga cola que cubrió mas de cuatro cuadras alrededor del recinto de la Ferretería El Aguila, en los suburbios de Punta Arenas.
- llegué a las siete de la tarde para asegurarme un lugar, decía el primer conductor que con toda la familia a cuesta y recien operado de la clavícula se habia levantado para asistir al novedoso espectáculo que comenzaría casi a las 10 de la noche... -Valió la pena, comentaba sonriente y bajito al retirase con los niños durmiendo en el asiento trasero.
La idea de presentar la pelicula Gente mala del Norte en sistema de Autocine, proyectar en un espacio abierto con el sonido emitido a través de un transmisor stereo de mediano alcance, fue la manera de poder cumplir con la promesa de exhibir masiva, publica y gratuita la producción regional que le tomo tantos años culminar a Riquelme.
- Cerré un circulo... comentaba, todo transpirado mientras desmontaba en la oscuridad los cables de la antena, el transmisor, los cables y el proyector. La película la escribí, dirigí y fotografié yo mismo, y no podia estar ausente de llevar a cabo yo mismo esta idea del autocine que era uno de mis viejos anhelos... nunca había vivido esa experiencia, y aunque hubiese una sala para haberlo proyectado, la idea del autocine era mucho mas romántica y me encantó hacerlo... fue muy especial... tanto silencio, tanta buena onda... ojala podamos repetirlo.
El equipo de organización del evento estuvo conformado por 8 personas, pero parecieron 20.
-Todo salio sobre ruedas!, comentaba pícaramente la risueña productora del espectáculo Caroline Pavez. -La gente se comportó de maravillas, fue muy educada y paciente, y les brindamos de véras un evento inédito y de buena calidad, pues en el recinto contamos con una ambulancia, un carro de bomberos, una grua, baños químicos... hasta con papel!, y por sobre todo brindamos una pelicula local hecha con talentos locales... lo que mas nos emociono fue al final cuando se rompio el silencio de la proyección con los bocinazos... fue mágico pues habia sido un día precioso y la noche estaba ideal, con la cruz del sur en el cielo sin nubes, sin frio y sin viento. Contamos 158 vehiculos, y uno de ellos llevaba 12 personas en su interior... la gente se retiraba muy feliz y agradecida, a pesar que comenzamos mas de media hora tarde y que la pantalla fue pequeña para la cantidad de vehiculos que pudimos dejamos entrar, imagína, hubo que cortar la fila y explicarle al resto que no podiamos recibir más vehiculos en el estacionamiento... Yo creo que mas al invieno repetiremos la experiencia.